Suavemente desparramada en algún cordón, con una quilmes al lado de mi corazón. Un par de poemas reprimidos que ya no sirven más, qué te aseguro nene, ella no te los va a dar. Y yo ahora sé que no, no te importo nada. Pero algún día caerás a mí. Por eso no llores por que no te ama, ama a quién llora por tí. En el interior de un bar también me podrás encontrar, ahogando penas en un vaso, tratando de olvidar. Que le brindaste tus ojos y ella te hizo una herida profunda. Que mi guitarra está triste no suena, y siempre a dentro de su funda. Y no la toco porque no te importo nada, pero algún día caerás a mi. Por eso no llores por quién no te ama. Ama a quien llora por ti. 



o sea nadie.